Rosendo Mercado: El Rockero de Carabanchel, El Poeta del Desencanto y el Sentimiento Atlético

Rosendo Mercado: El Rockero de Carabanchel, El Poeta del Desencanto y el Sentimiento Atlético

Rosendo Mercado Ruiz (Madrid, 1954) es mucho más que un músico; es un icono cultural, la voz indomable del rock urbano español y la conciencia crítica de una generación. Desde el humilde barrio de Carabanchel, Rosendo forjó un camino basado en la honestidad lírica, el riff directo y una filosofía de vida que él mismo resumió en su rotunda negativa a una estatua: el verdadero monumento son las palabras y las canciones.

Los Tres Tiempos del Rock Español

La carrera de Rosendo se articula en tres etapas fundamentales que definieron el rock en español:

Ñu (1974 - 1978): Aunque su paso fue breve, fue en esta banda de rock progresivo donde Rosendo comenzó a empuñar la guitarra y a absorber influencias de figuras clave como Rory Gallagher. Su evolución lo llevaría a buscar un sonido más crudo y directo.

Leño (1978 - 1983): Con Leño, Rosendo se consolidó como el motor del rock urbano madrileño. Canciones como "Maneras de vivir", "El tren" y "Este Madrid" se convirtieron en himnos que canalizaron la frustración y la rabia de la España de la Transición. Leño fue la banda que dio voz a la clase trabajadora, y su legado, a pesar de su corta vida, es incalculable.

Carrera en Solitario (1985 - 2018): Tras la disolución de Leño, Rosendo inició una prolífica carrera en solitario que lo mantuvo en la cima durante más de tres décadas. Álbumes como Loco por incordiar (1985), A las lombrices (1987) y Deja que les diga que no (1991) ofrecieron un rock con sello propio: guitarras afiladas, letras cotidianas llenas de ironía y crítica social, y esa inconfundible voz entrecortada. Temas como "Flojos de pantalón", "Agradecido" y "Pan de Higo" son la quintaesencia de un poeta que siempre le habló de tú a tú a su público.

Sentimiento Colchonero: El Rock y la Franja Rojiblanca

Rosendo nunca fue un ídolo de porcelana; fue un hombre de barrio, y ese sentido de pertenencia se manifestó en su inquebrantable pasión por el Atlético de Madrid.

El sentimiento colchonero —la identificación con el equipo que lucha contra la adversidad y el poder establecido— encaja perfectamente con la filosofía de su rock urbano. El Atlético, para Rosendo y su público, es el equipo de la clase obrera, del esfuerzo honesto y de la "minoría absoluta" que se resiste a rendirse, un paralelismo constante con las letras de su música. Rosendo nunca ha dudado en mostrar su afición, un gesto que lo une aún más a sus seguidores, demostrando que su corazón y su identidad están firmemente arraigados en el mismo espíritu de lucha. Incluso participó en la creación de un epílogo para el libro Sentimiento Atlético, una prueba de que su pasión va más allá del folklore.

El Retiro y la Filosofía del Auténtico

En 2018, Rosendo anunció su retirada de los escenarios con la gira "Mi tiempo señorías...", dejando tras de sí una carrera de 45 años. Su despedida no fue un adiós, sino una reafirmación de su integridad.

Su gesto más definitorio llegó cuando, al proponerse erigir una estatua en su honor en Carabanchel, Rosendo se opuso rotundamente al gasto, pidiendo que ese dinero se dedicase a fines más urgentes. Este acto de humildad y coherencia no hizo más que engrandecer su leyenda.

Rosendo Mercado es, en definitiva, el maestro de ceremonias de un rock que es tan de la calle como del alma. No necesitó premios ni estatuas para ser un gigante. Su legado sigue vivo en cada riff de tres acordes, en cada letra que habla de las injusticias cotidianas y en el corazón de cada persona que sigue eligiendo vivir con "maneras de vivir" auténticas.